El problema comienza cuando se acababan las dichosas paltas. El italiano es el producto más vendido, es estrella en cualquier parte. Si no tienes italianos estás frito, porque la gente se va, va a pedirlos a la competencia, al local del lado, del frente, de atrás, de arriba, de la cuadra siguiente, lugares no faltan, sobran en esta ciudad. Deme un italiano, tiene italiano, me llevo un italiano, decían, pedían, repetían, insistían hasta el cansancio...